Vitrificación de Óvulos

Cáncer y maternidad: ¿Hasta qué punto son compatibles?

Cáncer y maternidad: ¿Hasta qué punto son compatibles?Uno de cada cinco cánceres afecta a mujeres en edad reproductiva y los tratamientos convencionales para combatirla pueden, muchas veces, comprometer su fertilidad. ¿En qué casos es posible preservar la capacidad reproductiva de estas mujeres y qué riesgos asociados existen?

«Durante los últimos años, Chile ha experimentado un aumento paulatino de la mortalidad femenina por cáncer, y no sólo en la población mayor, sino también en pacientes más jóvenes. En efecto, entre los 15 y los 34 años, una de cada 5 mujeres muere por esta razón”, señala el doctor Mauricio Cuello, gineco-obstetra de la Pontificia Universidad Católica  y especialista en oncología.

El profesional enfatiza que estas cifras resultan preocupantes, en especial si se tiene en cuenta que, actualmente, las mujeres han ido postergando cada vez más la maternidad. “Hemos observado un incremento progresivo de embarazos y partos después de los 30 años, de los 40 e incluso a los 50. Y muchas veces se trata de sus primeros hijos”, precisa.

Efectos de los tratamientos convencionales
Debido a ello, hoy en día es mucho más posible que una mujer presente un cáncer ginecológico sin haber tenido hijos. Por eso, las terapias actuales deben orientarse no sólo a tratar la enfermedad, sino también a preservar su fertilidad. Una desafío nada fácil, ya que los tratamientos estándar contra el cáncer suelen ser agresivos y tener efectos colaterales en el organismo.

Lamentablemente, en casos extremos, por ejemplo, cuando se debe a recurrir a medidas como la extirpación del útero, las posibilidades de mantener el  potencial reproductor de la paciente son nulas.

Por su parte, la radioterapia tiende a producir esterilidad, al provocar una falla en la función ovárica. “En estos casos, preservar la fertilidad va a depender de factores como la edad de la paciente y del lugar en que se encuentre el cáncer que se va a tratar. Mientras más cercano esté el campo de radiación al área de los genitales internos, hay mayores probabilidades de que exista un daño”, explica este profesional.

En tanto, en la quimioterapia, el uso de ciertos agentes se asocia a un riesgo significativo de daño reproductivo, al comprometer la función ovárica. “Por eso es fundamental que antes de iniciar la terapia, se evalúe la más conveniente en cada caso pero siempre manteniendo en mente que el primer objetivo es tratar el cáncer adecuadamente y en segundo lugar preservar la fertilidad. Junto con ello, hay que explicarle a la paciente que si le van a ofrecer un tratamiento conservador de la fertilidad, existe un riesgo de recurrencia del cáncer”.

Dudas y aprensiones
El doctor Cuello cuenta que las pacientes que sobreviven al cáncer tienen una serie de temores “que vienen dados por el hecho de saber que tienen una predisposición genética a desarrollar cáncer, y también porque temen los efectos que puedan tener a largo plazo los tratamientos que se efectuaron”.

Respecto de estas aprensiones, el especialista menciona estudios que demuestran que la fertilidad de estas mujeres es un 15% menor que el de la población general. Afortunadamente, los riesgos de malformaciones no son mayores a los de una mujer sana.
“Otro miedo frecuente entre estas pacientes es que sus hijos también presenten cáncer. En general, no existe ese riesgo, excepto en aquellos casos que -por genética- tengan mayor predisposición a desarrollar esta patología”, explica.

En cambio, sí hay una mayor probabilidad de presentar complicaciones perinatales luego del tratamiento de ciertos cánceres, como el de cuello uterino o el de sus lesiones precursoras. En estos casos, indica este especialista, “existe una asociación entre el momento del embarazo y el riesgo de parto prematuro. Por eso, a las pacientes que fueron tratadas mediante cirugía -por ejemplo, con una conización- se les pide que posterguen entre 6 meses y un año el momento del embarazo”.

¿A quiénes practicarlo?
El equipo médico debe evaluar varios factores antes de aplicar una terapia oncológica que permita preservar la fertilidad, entre ellos, la edad de la paciente, el pronóstico del tumor que la afecta y la factibilidad real de tener hijos (además de sus deseos concretos de tenerlos).

Lo importante es tener claro que, frente a la exposición a terapias combinadas por cáncer, existen opciones para conservar el potencial reproductivo, ejemplo, de esto es la crio-preservación y la vitrificación de ovocitos. Y además, que es posible aplicar un tratamiento que no comprometa la fertilidad, pero siempre en casos bien seleccionados y en centros que tengan la experiencia para poder efectuar dichos tratamientos.

Fuente: La Segunda

1 Comentario

  1. ivanaCastro
    jueves 28 - abril - 2011 at 19:06

    Mi nombre es Ivana Castro,hace cinco años m diagnosticaron cancer de mama,pase por quimioterapia,radio y dos operciones m extrajeron un tumor de 7cm,fui paciente de alto riesgo con estadio 3,hace tres años m dieron el alta y mi deseo de tener otro hijo es enorme ,seguro que tengo muchas preguntas les agradecefria que se comunicaran conmigo los estare esperando…

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